Elmer Guerrero, vecino del sector de Lomas de San Andrés, adquirió su casa en 2020 y, tras realizar algunos trabajos, se percató que una cañería atraviesa toda su propiedad.
El tubo de alcantarillado, sumado a dos cámaras, corresponden al desagüe de una casa aledaña y llevaría alrededor de una década instalada de manera ilegal.
La instalación escurre agua hacia la calle, afectado además a los residentes del sector.