Entrevista de Tomás Mosciatti a Pablo Ghisoni: "Estuve detenido dos años y tres meses sin que hubiera pruebas en mi contra"

hrs

Durante más de una década, el médico gineco-obstetra argentino Pablo Ghisoni vivió una pesadilla judicial y personal. Acusado falsamente de abuso sexual contra sus propios hijos, estuvo detenido dos años y tres meses y seis meses con prisión domiciliaria con una tobillera electrónica, sin que hubiera pruebas en su contra. Su caso, finalmente sobreseído en doble instancia, se convirtió en un símbolo del impacto devastador que pueden tener las denuncias falsas.

Ghisoni conoció a su exesposa, Andrea Vásquez, durante la residencia médica. Se casaron en 1999 y tuvieron tres hijos. Pero la relación comenzó a deteriorarse con los años. En 2009, tras separarse, ella lo denunció por violencia doméstica y luego inició una serie de acciones judiciales que lo alejaron de sus hijos. Según el médico, su exesposa utilizó las denuncias como una forma de control: “Si no me das seis mil dólares por mes, no ves más a los chicos”, le habría advertido.

La justicia argentina tardó años en otorgarle la custodia de los menores. Pero cuando el tribunal ordenó su restitución, Andrea Vásquez presentó una denuncia por abuso sexual, lo que detuvo el proceso y marcó el inicio del calvario penal de Ghisoni. “El poder judicial genera una república de huérfanos con padres vivos, porque uno pasa a ser culpable apenas se hace la denuncia”, relató en conversación con Tomás Mosciatti.

Uno de los momentos más duros y a la vez liberadores llegó cuando su hijo Tomás, hoy de 23 años, confesó públicamente que la denuncia había sido falsa. “Cuando hice la denuncia era menor, pero lo hice porque me lo pidió mi mamá”, reconoció el joven en un video que se volvió viral. Ese gesto abrió el camino a una lenta reconstrucción familiar: “Estamos en un proceso de reconocernos; dejé a un niño de 13 años y hoy es un hombre de 23”, dice Ghisoni.

Aunque asegura que no busca venganza, sí anhela justicia. “Ha hecho mucho daño, sobre todo a mis hijos”, afirma sobre su exesposa. Hoy, su caso forma parte de una investigación judicial que busca determinar la existencia de una red de profesionales que fabricarían denuncias falsas en procesos de custodia.