La Corte Suprema condenó a Gendarmería como responsable del suicidio de una interna de la cárcel El Manzano de Concepción, ordenando el pago de una millonaria indemnización.

El máximo tribunal concluyó que en este caso hubo una falta de servicio del organismo penitenciario, al no cumplir el deber de proteger la vida de la persona privada de libertad.

Catalina Fuentes Velásquez, de 21 años y condenada a 244 días de cárcel por hurto y receptación, se suicidó el 18 de junio de 2013 en su celda de castigo, en la Sección Femenina del recinto penitenciario.

La joven se había enfrascado en una pelea con otras internas, por lo que fue sancionada por Gendarmería. Esto, a pesar de que tras otro incidente el día interior ya había intentado quitarse la vida por primera vez.

El abogado de la familia de Catalina, Andrés Durán, indicó que los gendarmes no realizaron la fiscalización adecuada dada su condición de inestabilidad.

Estos mismos argumentos fueron esgrimidos ante el Tercer Juzgado Civil y la Corte de Apelaciones de Concepción, que rechazaron la demanda presentada. Sin embargo, esta vez fue la Corte Suprema la que acreditó la negligencia por parte de los gendarmes y reprochó su actuar.

Por otra parte, la Asociación de Funcionarios Penitenciarios hace otra interpretación del fallo, estimando el dirigente Benito Saravia que al reconocer la justicia las múltiples responsabilidades que tienen algunos gendarmes debido a la falta de personal, el reproche por la falta de servicio es a Gendarmería y no a los funcionarios.

La sentencia, con el voto en contra del abogado integrante Álvaro Quintanilla, establece además el daño moral causado al hijo, a la pareja, a la madre y dos hermanos de la víctima, condenando al Fisco al pago de 100 millones de pesos como indemnización.