Más de 1.000 chalecos reflectantes en una hora vendió un local penquista. La normativa que exige portar este artículo entró hoy en vigencia y la mayoría de los comerciantes está sin stock. Algunos vendedores que tienen el producto subieron el precio.
El caos se desató en Concepción y las comunas aledañas, porque comprar un chaleco reflectante se convirtió en una odisea. Si usted aún no consigue el suyo, ármese de paciencia porque están prácticamente agotados y a partir de este 1 de enero portarlo será obligatorio para los conductores.