Vecinos cuyas casas se ubican a sólo metros de bosques acudieron a la Corte de Apelaciones de Concepción para que se ordene a forestales e inmobiliarias propietarias de las plantaciones fabricar franjas de seguridad, las que hoy son inexistentes.
Fueron principalmente jefes y jefas de familias cuyas casas se han visto amenazadas por los últimos incendios forestales en Penco, Tomé y Chiguayante, quienes llegaron hasta el tribunal de alzada penquista, para pedir la intervención del Poder Judicial en un tema sin regulación alguna.
Y es que como relataron las dirigentas vecinales Feliciana Palma, del sector San Carlitos, y Claudia Capponni, de Villa Montahue, sus casas están a sólo metros de pinos y eucaliptus plantados por las empresas prácticamente en el límite con los terrenos residenciales, no obstante haber llegado al lugar después que los particulares.