La llegada del otoño e invierno al Gran Concepción no solo implica una disminución en las temperaturas, sino que también cambios bruscos en la sensación térmica, a veces durante un mismo día. Es fácil contraer enfermedades, en esta época del año, y algunas de ellas son bastante comunes, pero se pueden combatir y prevenir eficientemente.

En primer lugar está el clásico resfrío, que no es exclusivo al invierno, pero el descenso de las temperaturas puede aumentar las probabilidades de enfermarse. El medio español El Mundo, destaca que tomar cítricos o hacer lavados con agua de mar, son maneras efectivas de combatirlo. También se puede tomar paracetamol.

Otra enfermedad que se vuelve más común durante esta época, es la gripe, que se traduce en un malestar generalizado. La fiebre es uno de los síntomas más comunes de esta enfermedad, junto al dolor muscular y la fatiga. La vacuna contra el virus de la influenza es un excelente método de prevención, mientras que los antigripales con varios principios activos, sirven para frenar la mayor cantidad de síntomas posibles.

En tercer lugar, la faringitis corresponde a la inflamación de la parte posterior de la garganta y es causada por un virus o bacteria, como los del resfrío y la gripe, o el estreptococo. La erupción cutánea o los ganglios linfáticos inflamados, son otros síntomas comunes de faringitis.

La bronquitis es una enfermedad tan contagiosa como la gripe y puede derivar de esta. Sus síntomas incluyen dificultad para respirar y dolor de pecho, usualmente causado por tos frecuente.

Por último, cualquiera de las enfermedades anteriores, puede volvernos más vulnerables a otros males, como la otitis. Esta es una inflamación del oído que no solo provoca dolores punzantes, sino que deja los conductos del oído más vulnerables a infecciones. Las gotas para el oído y los antibióticos ayudan a combatir esta enfermedad, pero no los antivirales, ya que la otitis es causada por bacterias.