La mayonesa es sin duda uno de los aderezos más usados para acompañar tus platos favoritos. Sin embargo, hay quienes prefieren no prepararla, ante el inminente riesgo de contraer samlonella u otra enfermedad producida por el consumo de huevo crudo.
No obstante, el mundo de la gastronomía encontró una alternativa más segura. Se trata de la “lactonesa”.
Según destaca la sección El Comidista del diario El País, esta emulsión a base de leche y aceite, tiene una textura muy similar a la del huevo.
La receta
Para unos 300 g de lactonesa, necesitas 100 ml de leche entera a temperatura ambiente, 200 ml de aceite, sal al gusto y zumo de limón o vinagre.
El primer paso es batir la leche con un procesador, durante un minuto y medio aproximadamente, a velocidad media. Comienza añadiendo el aceite a hilo, sin mover la batidora del fondo.
En esta etapa puedes inclinar un poco el recipiente para apreciar el cambio de textura, de líquido a emulsión.
Cuando esto ocurra, debes añadir la sal, el limón, y aceite en mayor cantidad. Sube y baja la batidora para emulsionar y mezclar los ingredientes de mejor manera. De este modo, tendrás un lactonesa lista para consumir.
Algunos inconvenientes
En el caso de que tu preparación no emulsione, solo debes darle un poco más de tiempo con la batidora. Recuerda que esta receta conlleva más paciencia, en comparación a la que se hace con huevo.
Es poco probable, pero puede ocurrir que tu preparación se corte. Para remediarlo, debes lavar y secar bien la batidora. Posteriormente toma otro recipiente limpio y añade un dedo y medio o dos de leche.
Mete la batidora y ponla a velocidad media hasta que la leche quede bien espumosa. Lo siguiente es añadir lentamente la lactonesa cortada, y cuando empiece a emulsionar, continúa con un poco menos de cuidado.
¿Intolerante a la lactosa o vegano?
Si eres intolerante o alérgico, también puedes hacer esta preparación con leche sin lactosa, obteniendo el mismo resultado.
Asimismo, podrías reemplazarla por una bebida vegetal de soja, sin endulzar. En este caso quedará menos espesa, pero si la pones en el refrigerador, tomará más cuerpo.
Sin embargo, no recomiendan utilizar leche de avena o almendra, ya que debido a su sabor, el resultado no será muy agradable.
Dale otro toque
Al igual que la mayonesa tradicional, puedes añadirle otros ingredientes para darle un toque diferente. En este contexto, el ajo es una buena opción para acompañar papas al horno o hervidas, carnes o pescados.
Asimismo, podías añadirle cebollín, pimiento o un buen chorro de tu salsa picante favorita para acompañar asados.
Mientras la preparas, otra idea es agregarle aceitunas, hierbas aromáticas y una parte de yogur natural. Esa preparación es ideal para echarle a las ensaladas.
Cabe señalar que si te sobró mucha lactonesa, puedes guardarla máximo cinco días en un frasco cerrado, en el congelador del refrigerador.