Personal de la Policía de Investigaciones (PDI) retiró de las oficinas de Enap en Santiago antecedentes sobre la adquisición del crudo iraní causante de los episodios de contaminación en Quintero, Puchuncaví y Talcahuano en 2018.

Fue pasadas las 10:00 horas que personal de la PDI ingresó a la sede de Enap en avenida Apoquindo para cumplir una orden del Ministerio Público y retirar documentación vinculada a la indagatoria por la contaminación ambiental e intoxicación de más de mil personas provocada por el crudo iraní.

Puntualmente el objetivo de la diligencia fue tener acceso a las decisiones del directorio de la estatal para la compra de un petróleo altamente contaminante, según indicó el abogado querellante, Remberto Valdés.

Desde Enap se precisó que la diligencia no fue un allanamiento, sino un trabajo coordinado previamente con la Fiscalía, de manera de colaborar con la investigación y poner a disposición del organismo los antecedentes solicitados.

El abogado Valdés agregó que los documentos obtenidos podrían ser clave para determinar nuevos imputados en una arista paralela a la ambiental, pues la adquisición del crudo iraní generó importantes pérdidas a la empresa estatal.

Para las víctimas de la contaminación en Quintero y Puchuncaví, el avance de la pesquisa es esperanzadora, dijo la vocera Olga Garri, coincidiendo en que además de los seis ejecutivos ya formalizados, hay más responsables justamente por la compra del crudo del tipo Iranian Heavy.

La investigación formalizada tiene hasta ahora siete imputados como responsables de la contaminación en agosto de 2018, con un plazo de seis meses reciente otorgado por el Juzgado de Garantía de Talcahuano, el último para que la Fiscalía concluya la indagatoria y decida si llevará el caso a un juicio oral.