Un hombre murió presumiblemente electrocutado en una estrecha cámara subterránea, ubicada a un costado de la costanera de Concepción, hasta donde ingresó por razones que se indagan.
A este hoyo en el pavimento se ingresa removiendo una pesada tapa cuadrada de concreto, junto a la cual quedó un carro de supermercado que la víctima usaba, lo que supone una condición de calle del fallecido, cuyo cuerpo quedó calcinado.