Una compleja situación se encuentra viviendo un matrimonio de Chiguayante, luego de que denunciaran el envenenamiento de su gato «Duque», aparentemente por parte uno de sus vecinos.
La mascota, que servía como animal de terapia para sus hijos TEA, se sometió a una autopsia que arrojó que el felino habría consumido comida de perro alterada.
La familia indicó que los problemas comenzaron cuando denunciaron al vecino por maltrato animal, dado que este tiene un perro que ladra constantemente producto del abandono en el que se encuentra. Esta situación les afectaba enormemente debido a la condición de los hijos, sin embargo no esperaban que el problema escalara al punto de llegar a ser amenazados e insultados por el sujeto y su esposa.
El matrimonio manifestó su temor ante las posibles represalias que puedan tomar sus vecinos tras esta nueva denuncia formal, señalando que cuentan con las pruebas de maltrato hacia el perro y el informe toxicológico del gato envenenado.
