Una fobia la podemos definir como un trastorno de ansiedad, es un miedo intenso e irracional que se provoca tras una situación, un animal o un objeto.
Este trastorno se desarrolla cuando un temor se hace tan extremo, que la persona que lo sufre comienza a organizar su vida para evitar las situaciones u objetos que lo intimidan y son la fuente de su ansiedad.
Síntomas de que podrías tener una fobia
Si una persona sufre una fobia simple y no tiene contacto con la fuente de su miedo es poco probable que el trastorno afecte su vida diaria.
Sin embargo, cuando un individuo sufre una fobia compleja, como la agorafobia, es muy probable que el trastorno sea muy discapacitante y afecte su vida diaria.
Causas de la fobia
Aunque cada fobia tiene su propio tipo de ansiedad o grado de temor, las verdaderas causas en todas ellas son más complejas, y pueden involucrar factores tanto ambientales como psicológicos.
Un ejemplo es la famosa “agorafobia”, una de las fobias más comunes y una de las más discapacitantes, los temores, miedos y ansiedad se manifiestan en actividades como: salir de la casa, viajar solo, ir a lugares públicos con mucho flujo.
El grado o nivel de miedo de las personas al enfrentar estas situaciones depende de cada una.
Aunque muchos individuos con fobias logran mantener un empleo, otros no pueden salir de su casa.
Las fobias suelen ser más comunes en mujeres y por lo general comienzan en los primeros años de la adultez.
Tratamientos
Una persona con una fobia tiende a evitar las situaciones u objetos que le producen ansiedad, pero esto a menudo provoca que la fobia empeore a medida que pasa el tiempo.
En lugar de crear situaciones para evitar la causa de nuestra fobia, es mejor enfrentar ese miedo, y esto se puede lograr con la ayuda de un terapeuta especializado.
Los tratamientos por lo general están basados en las llamadas terapias “habladas”, como la terapia cognitiva conductual (TCC).
Autoayuda
Algunas personas deciden no buscar ayuda médica para tratar sus fobias, y aprenden a desarrollar estrategias o técnicas de autoayuda para enfrentar sus miedos.
Otra estrategia muy útil para combatir las fobias son las técnicas de relajación, con las cuales se enseña a la persona a mejorar su respiración para reducir la tensión.
Y si esto no funciona consulte a su médico porque hay varios tipos de fármacos disponibles, como los tranquilizantes o los antidepresivos, para ayudarle a controlar sus ansiedades.